La proyección es la base de la percepción. El mundo que ves es lo que tú has puesto en él. Es el testimonio de tu estado mental, la imagen exterior de tu estado interior. Tal como un hombre piensa, así percibe. Por lo tanto no intentes cambiar el mundo, opta por cambiar tu manera de pensar en el mundo.
Melchor, Gaspar y Baltasar.
Nosotros somos los magos de nuestra vida y venimos a este mundo para ejercer esa magia. De la chistera que cubre nuestros cerebros salen los pensamientos que crean el mundo que cada uno percibe. Puedes creer que percibimos un mismo mundo objetivo similar para todos, pero el día en que te deshagas de esa ilusión te darás cuenta de que el mundo que percibes es único, como son únicos tu rostro, tu historia y tus memorias. Cuando era niño me mordió un perro y aparte del dolor de la dentellada, fueron desagradables los puntos y las curas del tratamiento; sin embargo a mi amigo Baltasar un pastor alemán le salvó de morir ahogado en una playa de Ciudad del Cabo. Durante nuestras vidas los dos hemos percibido a los perros de manera muy distinta. Nuestras memorias eran filtros que condicionaban esa percepción. Esas películas de memorias que se proyectan en la pantalla de lo que consideramos mundo externo son inconscientes para la mayoría de las personas. Creemos que somos víctimas de las circunstancias y no sus amos y creadores. Dado que la palabra sánscrita Karma ya se ha incorporado a nuestro lenguaje vamos a llamarlo así. Recuperar la conciencia y la responsabilidad de lo que pensamos, sentimos, hacemos, y la construcción consecuente de lo que llamamos realidad se llama Dharma, otra palabra del yoga que no está tan de moda -¿por qué será? Irresponsabilidad es infantilismo y madurez es responsabilidad. La etapa de la vida de la infancia es emocionalmente dependiente de los padres y educadores y si no madura, puede seguir siendo dependiente toda la vida de los dirigentes sociales que nos prometen arreglar nuestras vidas con su paternalismo interesado. Si quieres puedes apearte de ese tiovivo ilusorio y tomar las riendas de tu vida, no es fácil, la muchedumbre y su inercia te incitarán a lo contrario y podrás ser controlado por ordenadores, realidades virtuales, multinacionales y por un demoníaco Estado patriarcal que te prometerá arreglar tu vida. Quizás después de un largo camino hacia dentro podrás llegar al simbólico portal de Belén ante el que los tres yogas Reales se arrodillan, el yoga del cariño que ponemos en lo que hacemos, el disfrute que produce el hacerlo y que en si mismo es la recompensa, y el yoga de la discriminación inteligente que elige el camino más directo para llegar al Corazón. Y los Reyes se arrodillan ante la inocencia del niño que hemos sido y que vuelve a serlo, sin distraernos en la ilusión del mundo y estando Presentes y alertas en Éste que es el único momento en el que está la Vida. |